A través de los ojos de Raymond Carver, se narran las horas finales del padre del autor.
Mérida, Yucatán, 21 de enero de 2018.- El escritor Federico Vite, hidalguense avecindado en Guerrero, recibió esta mañana el Premio Nacional de Cuento “Beatriz Espejo” 2017 en ceremonia encabezada por el titular de la Secretaría de la Cultura y las Artes (Sedeculta), Roger Metri Duarte, con la presencia de la creadora que da nombre al reconocimiento.
Durante el protocolo, realizado en la Biblioteca Pública Central “Manuel Cepeda Peraza” del Centro Histórico y ante el director de Cultura del Ayuntamiento de Mérida, Felipe Ahumada Vasconcelos, el funcionario estatal recalcó que por 17 años se ha mantenido el espíritu para promover dicha forma narrativa, al colocar este certamen entre los preferidos a nivel nacional.
Por su parte, la doctora Beatriz Espejo Díaz expresó sentirse afortunada por saber que el concurso se ha consolidado, como lo demuestran las más de 400 propuestas recibidas en esta edición.
Asimismo, recalcó su sorpresa ante la coincidencia de que los tres galardonados admiren a Antón Chéjov; que al igual que él, dos sean médicos de profesión, y que se dediquen a plasmar la realidad por medio de la literatura desde esa perspectiva.
El estímulo económico fue de 50 mil pesos para quien, bajo el seudónimo Tess, con originalidad y un fluido manejo del lenguaje, desarrolló la muerte de su padre a través de las últimas horas de vida del cuentista de corte minimalista Raymond Carver, que a su vez hizo referencia a la agonía del ruso Chéjov, plasmada en el relato Tres rosas amarillas.
Al tomar la palabra, Federico Vite narró el proceso de creación de Mausoleo, signado en las múltiples noches de entrevistas a médicos, enfermeras, burócratas de la salud y, especialmente, enfermos, donde se plasmaron los miedos primitivos y el anhelo de contemplar la belleza en el frágil proceso de la defunción.
Visiblemente emocionado, relató que este texto de 15 cuartillas tiene un significado especial, pues lo envió a Yucatán para su participación en esta convocatoria después de recoger las cenizas de su padre en Acapulco, como una forma de sobrellevar el duelo, sin tener noción del tiempo, que hoy define como muerte.
El también columnista del rotativo poblano El Popular recibió el galardón del Concurso Nacional de Cuento “Juan José Arreola” 2017, con el volumen Zeitgeist Tropical; el Premio Nacional de Novela “Ignacio Manuel Altamirano” 2003, y el del Concurso Estatal de Cuento “José Agustín” 2001, entre otros.
Fue becario de los Fondos Nacional para la Cultura y las Artes (Fonca) 2010-2011 y de Estímulos a la Creación Artística de Guerrero 2009-2010, así como de la Fundación para las Letras Mexicanas 2003-2004 y 2004-2005. Entre su obra publicada, se encuentran Y entonces las bestias (2003), Fisura en el continente literario (2006) y La parábola de la cizaña (2012).
En el mismo acto, se otorgó las menciones honoríficas a los yucatecos Alonso Humberto Marín Ramírez por No te dejan salir y a Edgardo Arredondo por El duelo; el regiomontano Luis Aguilar Martínez también la obtuvo por Un hombre no entrega el corazón, pero no pudo asistir por cuestiones de agenda.
Estuvieron presentes el jefe del Departamento de Literatura y Fomento Editorial de la Sedeculta, Jorge Cortés Ancona; la subdirectora de Fomento Cultural del municipio, Liliana Bolio, y los demás integrantes del jurado calificador, Carlos Martín Briceño y Adolfo Fernández Gárate.