El famoso y cacareado «censo para el Bienestar» promovido por el gobierno de México resultó un rotundo fracaso toda vez que está preñado de tintes políticos, partidistas y los amiguismos y compadrazgos fueron la constante entre los mal llamados «Servidores de la Nación» que a lo único que sirvieron fue a sus intereses personales.
Esta mañana quedó evidenciado que el censo «Para El Bienestar» no sirvió en su encomienda original que es censar casa por casa a los jóvenes, adultos mayores y gente discapacitada para que estos reciban un recurso que el gobierno de Andrés Manuel López Obrador prometió en su campaña, pues hubo una larga fila desde las 8 de la mañana, quizás unas 700 personas, en su mayoría personas de la tercera edad.
La queja de los adultos mayores es que las personas encargadas de esa encuesta, que se hacen llamar «Servidores de la Nación», no realizaron de manera adecuada su trabajo, ya que al momento de censar tomaron partida política, encuestaban a quien ellos querían o de plano no censaron casa por casa.
Ante este hecho, la gente adulta acudió a la Secretaria de Bienestar, inmueble que hoy sufrió de una fuga de agua que impidió por un buen tiempo la atención a la gente. Es por demás decir que el servicio de sanitarios no funciona , agravando la situación de espera de los adultos mayores para ser registrados en algún programa que maneja esta Secretaría.
Otro factor es que el censo se convirtió inoperante y de tinte político al darles a los ayuntamientos la facultad de censar, pues estos no cumplieron y mucho menos promocionaron el programa, todo parece indicar que los alcaldes en su gran mayoría no están en la misma sintonía con el Presidente de la República.
Asimismo, hubo una manifestación de la Unión Nacional de Trabajadores Agrícolas ( UNTA Yucatán) para que sean atendidos personalmente por el Delegado de los Programas de Desarrollo, Joaquín Díaz Mena, la demanda de estos es que sus agremiados sean registrados y poder acceder a los 25 programas que maneja dicha Secretaría.
Gabriel Pech @GpcMaya
