La naturalizaciòn cultural de un sistema tramposo en Mèxico.

LA NATURALIZACIÓN CULTURAL DE UN SISTEMA TRAMPOSO EN MÉXICO.
Jesús Solís Alpuche
1.- No acostumbro escribir por encargo, pero me han pedido mi opinión respecto al “sonado caso” del ácido vertido en algunas de las calles de Mérida con el consecuente daño, mínimo en proporción al escándalo que se le ha dado al irresponsable hecho, respecto al patrimonio de la ciudad, cuando hay otros patrimonios, como son los salarios, las pensiones, el trabajo digno y otras garantías que nadie se fija cuan dañados están.
2.- La guerra de papel que se ha desatado, entre el PRI y el PAN y los gobiernos del Estado y Municipal, no solo es una densa cortina de humo, sino que sociológicamente, se puede considerar una estrategia, para naturalizar, culturalmente, un sistema de relaciones políticas tramposas, entre las cúpulas partidistas-equipos, que están en competencia y juegan por el control de una clientela confundida en la defensa de colores partidistas, sin conocer sus programas y proyectos en materia económica y social para la población.
3.- El hecho de destruir una vía de comunicación municipal es un delito, pero este se centra en autores de la misma clase política, empresas y medios de comunicación que polarizan la información, incluso con testimonios, que como bien sabemos pueden provenir del llamado “Sindicato Único de Testigos Falsos” para darle mejor vida a las informaciones y judicialización del caso. Con el fin del aliento de morbo ciudadano; mientras en los casos reales de delincuencia y conatos de robo patrimonial, como el de playas en Celestún, y otros ejidos de la región, con miras al plusvalor que adquieren frente al futuro megaproyecto turístico, y grupos sociales exigen cuentas; hacia allá no hay información trascendente.
4.- Incluso se dispone la incursión de la policía, como en Celestún, que en forma violenta ingresó a media noche tirando bala, y levantando a quienes encontró ese 21 de mayo a media noche en el centro de la población. Intimidación y cortinas de humo, mentiras y medias verdades, son los recursos para naturalizar el sistema históricamente tramposo que está impactando totalmente a la población.
5.- Las mismas Redes Sociales, que son una modalidad ciudadana de interacción en la comunicación, han sido permeados, por TROLLES, profesionales y amaters. Informaciónes editadas e inventadas, está afectando este importante medio de comunicación con el fin de acabar con la poca credibilidad que sostiene la conciencia popular mexicana. La penetración del convencionalismo en la corrupción, la violencia y la impunidad. La naturalización, por no decir la institución de las complicidades, está envenenando cada día más a la sociedad mexicana en general. El patriotismo ya no existe como valor social. La honestidad, la horades, el honor y la dignidad, se están perdiendo como valores individuales, para naturalizar y legitimar la competencia a base del fraude, la injusticia, la mentira con publicidad, además de la violencia del el crimen organizado y desorganizado, como algo regular y regulado. Porque de ninguna manera se ve los avances del combate en su contra.
6.- Al contrario, en Kinchil, se les vincula; y que yo sepa, el cuerpo policiaco, tienen dos denuncias en la Agencia 26 de la Fiscalía, en Hunucmá, donde hay docenas más que no se les da seguimiento al ser desgastados y desalentados los demandantes de parte de la policía judicial y los funcionarios que deberían estar al servicio de la justicia. Lo mismo sucede en la Codhey, que cada vez asume con menos capacidad su papel de Organismo Público Autónomo, contra los abusos policiacos y de funcionarios públicos que se exceden en su autoritarismo y negligencia en sus servicios.
7.- Todas estas tácticas dilatoria, de intimidación y/o desaliento social en contra de las expectativas de justicia, considero que son parte de una estrategia para naturalizar completamente el sistema tramposo de la vida pública: Desde los fraudes electorales, hasta los despojos de tierras, territorios, acuíferos, playas, minas y toda la propiedad social, incluyendo la propiedad federal y los derechos y garantías sociales. Pero siempre, que el pueblo manifieste inconformidad, las fuerzas, supuestamente de seguridad incurren en la represión y la persecución de los inconformes. Se hará a nombre del orden, la estabilidad y la paz pública. Una paz pública que tampoco se circunscribe a las calles de Mérida, donde los mismo PANISTAS, o los malosos PRIISTAS derramaron acido, para armar un GRAN SHOW.
8.- Nuestro Estado es uno de los más pobres en ingresos, de más bajos salarios en la península y de mayor despolitización, quizás por eso es el más pacífico. También porque en el Siglo XIX del liberalismo juarista, la trampa de las leyes de desamortización no era para afectar a la Iglesia sino a las comunidades patriarcales acaudilladas por gente como Jacinto Pat, Cecilio Chi y otros que capitaneaban al pueblo maya. Estos se rebelaron contra la modernización del Estado, pero fueron violentamente escarmentados, castrados y remitidos a Cuba. La represión fue bárbara y esto prevalece en la memoria del maya profundo. Siglo XX sucedió que para quietarle el poder al clero, en lugar de tratar de mejorar la calidad de vida y conocimiento de la población por medio de la educción racionalista, se quemaban santos e iglesias y se perseguía a cristeros y sinarquistas. Nunca nuestro país ha tenido un proyecto pacífico estable de desarrollo con justicia y dignidad para todos. Yucatán podría ser alternativa, si hubiera voluntad política, reconocer que valores como la simulación, las complicidades y las cortinas de humo informativo, no conducen a la democracia y menos a la concientización social. Pero esto no se logrará debatiendo y judicializando con hechos como los del ácido en algunas calles, porque estos mueven a la naturalización de la corrupción, el conflicto partidista superfluo, que no debe penetre más a nuestros pueblos. chantzacan@hotmail.com

scroll to top