María Fritz Sierra y su discurso contra quienes «vienen de otros lugares»

Olvidándose de todo lo políticamente correcto, desmemoriada de que su jefe no es yucateco por nacimiento y sin tomar en cuenta que muchos radicados en Yucatán son empresarios y generan trabajo y pagan sus impuestos (federales y estatales), María Fritz Sierra, segunda de a bordo del Gobierno de Mauricio Vila Dosal, arremetió contra “la gente que viene de otros lugares”.

Como de costumbre, en su afán de limpiar la maltrecha figura de su jefe, confidente y amigo, la señora “abogada y política yucateca” (como se le puede encontrar en wikipedia) justificó a un elemento de la policía estatal por lanzar, supuestamente, sin autorización pero en defensa de sus “compañeros”, una bomba de gas lacrimógeno en la marcha del pasado domingo 19 de enero.

“En Yucatán se resuelven las cosas con respeto mutuo entre las autoridades y las ciudadanías, fórmula a la que estamos acostumbrados y no permitiremos que la cambien gente que viene de otros lugares; aquí en Yucatán, es y así será en esta administración, el derecho de todas las personas a manifestarse será respetado. Los apoyamos y exhortamos a que lo sigan haciendo. Lo que no podemos permitir es que comience a pasar lo que sucede en otros estados de la República, donde la gente cree que por su derecho a manifestarse pueda cometer actos de violencia y agresiones hacia los cuerpos de seguridad”, dijo la funcionaria estatal.

Lo que no dice la dama es que el Gobierno panista, calca perfecta del PRI, despliega a sus “orejas” en conferencias de prensa, eventos políticos y en protestas legítimas; éstas, hacen un informe que llega a Comunicación Social y de allá a la Secretaría de Gobierno, de tal forma que tienen a sus infiltrados, alguno de ellos supuestos periodistas cuyo único compromiso es con su bolsillo. De tal forma, que al igual que los priístas, los ultraconservadores tienen a sus agitadores y en la marcha del pasado 19 de enero, no fue la excepción. De ello hace mención el portal Tu Espacio del Sureste.

Pero lo que en realidad “calienta”, como dice el Presidente de México, es el doble discurso de la señora Fritz Sierra. Acusar a los foráneos de la molestia social, acusarlos de salir a la calle a defender su derecho, de reclamar los abusos del Gobierno. Ella, la funcionario, la que gana dinero de nuestros impuestos, NO TIENE MADRE. Quienes desde niños vinimos a Yucatán, no por gusto, sufrimos en el colegio lo que hoy se llama bullying, no sólo de compañeros sino incluso de maestros. El mismo Gobernador fue señalado como “huach” por haber nacido en la capital del país.

La falta de respeto de esta señora deja ver de qué están hechos los conservadores “yucatecos”. Miles somos los radicados en Yucatán, hijos de yucatecos, que no podemos aceptar este discurso de odio y sectarismo. Su regionalismo cae en lo más estúpido, tomando en cuenta que hoy día, ningún estado de la República está libre de habitantes de “otros lados”.

Ese mismo discurso fue el que Mauricio Vila Dosal dijo, muy protegido por sus seguidores, en un evento público. ¿Cuándo dará la cara a la prensa en una conferencia como las que hace López Obrador?

Es menester comentarles que las nuevas generaciones ya no piensan como ellos, sus padres y abuelos. Las nuevas generaciones son más educadas y por ello, el tiempo de los gobiernos sin crítica, ya se acabó.

Autor: Redacción de Arte y Cultura en Rebeldía

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