Por: *Guillermo Cauich Duran
Cuando el «Oro Verde», como se llamaba en otros tiempos al henequén, estaba en su apogeo y en plena producción en Yucatán, el campesino y su familia tenía trabajo y comida, pero llegó a la gubernatura de manera interina la priísta Dulce María Sauri Riancho en 1991 orquestando la «liquidación henequenera»
Este acontecimiento fue solo el inicio de la «quiebra» y los estragos que pasarían los ejidos en Yucatán, donde poco a poco se fueron quedando sin oportunidades y sin comida las familias campesinas. Actualmente, poco a cambiado este panorama de miseria que vive el campo yucateco sujeto a políticas públicas vacías de ideas y de apoyos reales para la transformación de dicho sector.
Estos apoyos se concentran en programas que no dan el ancho para lo que se requiere en el campo, y los programas para las mujeres , los jóvenes y pequeños productores han sido eliminadas, asestando un duro golpe a los sectores más vulnerables. No está por demás decir, que en este sexenio se han desmantelado instituciones que fueron creadas para el desarrollo productivo del campo.
Nunca se va olvidar el mega recorte de más de 22 mil millones de pesos que sufrió el campo el año pasado, ese fue una muestra de lo poco que al gobierno y los diputados les interesa la verdadera transformación del campo mexicano, sin ese apoyo y la del gobernador del estado que solo beneficia a sus amigos, podemos deducir que en estos años venideros los pequeños productores, las mujeres, los jóvenes y todos los que trabajan el campo nos veremos en condiciones muy, pero muy precarias , en la miseria pues.
Pero, nuestra lucha seguirá , porque queremos alcanzar la transformación del campo, no nos vamos a rendir, moriremos en la raya por alcanzar la justicia social para este sector que alimenta a toda la población de México. Zapata Vive la Lucha Sigue!!
*Dirigente en Yucatán de la Unión Nacional de Trabajadores Agrícolas (UNTA)
