ENTREVISTA A JESÚS SOLÍS ALPUCHE, DIRIGENTE DE EL BARZON-CHAN TZAB CAN, A.C.s
Por: Gabriel Pech.
No es fácil dar con él cuando se le busca para una entrevista directa. Fui a Kinchil, pero estaba en Dzilam Bravo, en atención a pescadores excluidos de registros en el trabajo pesquero, un cuento de nunca acabar. Lo esperé varios días en nuestro café favorito, y cuando por fin llegó, le cuestioné que mientras en su pueblo de origen, Kinchil, los ejidatarios enfrentaban serios problemas, como candil de la calle, este atendiendo otros problemas en otros lugares. Me respondió que “todos ya son personas mayores y deben saber lo que hacen, o saber lo que les dicen que hagan por asesores…”
En el más reciente Artículo que le publicamos, Jesús Solís Alpuche dice atinadamente que: que los problemas en los ejidos, es de todos los pobladores y las comunidades y no sólo de quienes tienen registro agrario y están dispuestos a enajenarse de esa responsabilidad, sin valorar ese Derecho, cediéndolo a empresarios o traficantes de tierras ejidales, sin saber qué tipo de empresas o “cosa” van a establecer en sus patios traseros.
Como insistí en su responsabilidad para con Kinchil y la región poniente del Estado, donde inclusive, como miembro de una organización denominada Chikin Já, deben defender la región en su forma patrimonial, de la contaminación y el despojo, por fin saqué estas interesantes declaraciones.
-No puedo hablar por Chikin Já, que es un colectivo plural y diverso. Yo y otros estamos como El Barzón y otr@s compañer@ como Chan Tza Can. En el colectivo hay panistas, priistas y ya sabemos cómo les va si hablan con el gobierno del Estado y sus partidos, de manera que pinto mi raya al respecto de opinar como tal. Pero como Barzon-Yucatán, te puedo decir que en más de 26 años de las reformas en materia agraria y del llamado deslinde definitivo, en que al ejido de Kinchil el gobierno le arrebata cerca de 5 mil hectáreas para dárselas al ejido de Tetiz, las cuales fueron vendidas entre 2010 y 2016, pero nunca han venido a regularizar, porque en Kinchil no se aceptó el Programa de Certificación; nunca, como ahora se habían metido a sembrar la discordia en este ejido.
– ¿Por qué dices que ahora se meten con el Ejido de Kinchil, y por qué no antes como en otros ejidos?
-De hecho, en todos los ejidos del Estado se están agudizando los conflictos, porque los que operaron tierras de mala fe, mediante asambleas espurias, no está registradas, y de alguna manera, la gente está abriendo los ojos respecto al valor de su patrimonio. Vienen programas de impulso a la producción en el campo, de forestación, de ganadería y otros que vuelven la vista a la necesidad de tierras para acceder a ellos y reviven los reclamos a los derechos, incluso quienes mal vendieron sus parcelas, quieren recuperarlas.
En Kinchil no se habían metido, porque las 21 mil hectáreas que le quedan, (de las 28 mil que el presidente Cárdenas les otorga por decreto en el Diario Oficial en 1938) son de uso común, y como saben que nuestra gente es de “pocas pulgas”, pues las tenían reservadas.
-Y es aquí donde volvemos con las operaciones, asambleas y concesiones hechas a la carrera y no cumplen con las formalidades necesarias, pero aun ofrece respetar las que inmoralmente legalizaron la transferencia de derechos parcelarios a particulares.
El presidente López Obrador ha dicho que las concesiones de minas, de empresas extractoras de petróleo y otras que no cumplen las formalidades legales, irán para atrás. Entonces los traficantes y nuevos ejidatarios están asustados, más cuando se comisiona a una persona apegada el proyecto de la 4ª. T, como aparenta Alfredo Ramírez, pues en verdad están asustados.
-Pero esto qué tiene que ver con Kinchil y sus conflictos intraejidales…???
– La empresa Porcícola Keken, tiene un grave problema con su exceso de producción y contaminación del acuífero y la región en general. Después de su aparente derrota en Homún, tiene fija todas expectativas en la región entre Kinchil y Celestún. Pero sólo cuenta con 3 mil hectáreas, y para justificar el volumen de su producción necesita 2 mil más, cuando menos. Y como las tierras del ejido de Kinchil no están regularizadas más que como de uso común, pues les urge, la regularización.
-Fausto May Pisté ha tratado de regularizar en forma económica, o sea para el usufructo, pero, eso no es lo que quiere la empresa, pues no está dispuesta a pagar renta al ejido, sino que quiere comprar, y por eso apoya, promueve y agita la gallera en Kinchil; mientras aliada del gobierno, realiza eventos culturales, como el de Ricky Martin, pagando fortunas a los medios de información, par que colateralmente se olviden del homofobia, la contaminación regional de sus empresas y dejen de publicar el grave daño al acuífero peninsular y al medio ambiente.
-Por eso considero que el problema de Kinchil y otros ejidos, no es sólo de la incumbencia de los ejidatarios, que son una fracción mínima de la población y tiene a su nombre más de la mitad del territorio del Estado. Yucatán tiene 737 ejidos de los cuales 698 y 109 mil 655 ejidatarios entraron al Programa de Certificación Procede, y según el resumen ilustrativo de la problemática de tierras hay una superficie en conflictos de más de 792 mil 670 hectáreas que no se han podido regularizar por causa de que no hay entendimiento de las leyes. En el río revuelto por la ignorancia de derechos agrarios.
-El ejido de Kinchil, tiene más de 21 mil hectáreas, de las que un centenar de personas, que exigen derechos, pero ignoran sus obligaciones, y pretende decidir el destino de estas tierras, sin tomar en cuenta la decisión de los cerca de 9 mil kinchileños que serán más afectados por la contaminación de las industrias porcícola que pretende expandirse. Este es el problema, que no se ve, incluyendo a Chikin Ja, más o menos, concluye.
SINTESIS DEL PROGRAMA PASADO DE “CRISIS EN EL CAMPO YUCATECO”
El Coordinador de la Mesa para analizar la crisis actual en el campo yucateco Dr. Gerardo Duran se dirige a los integrantes Salvador Arteaga Trillo, Gaspar Loria Avilés y Jesús Solís Alpuche, proponiendo las perspectiva de: 1.- “Conocer la crisis por la que atraviesa el campo yucateco y qué pasa con los ejidos. Y 2.- A quien le benefician los enfrentamientos, la división en los comisariados y quien está detrás de los conflictos agrarios.
JSA.- Expone que las libertades y derechos que defiende son los del desarrollo justo y democrática y no del crecimiento de la economía capitalista. Sucede en el campo que, desde hace 36 años con los cambios económicos para un supuesto desarrollo con modernización y crecimiento económico, la propiedad ejidal se empezó a flexibilizar. La procuraduría agraria que nace en 1992, en lugar de la regularización en los ejidos, para la justicia en el campo, procura el PROCEDE y la transferencia de derechos, en una forma por demás corriente desde el punto de vista legal, aprovechando la ignorancia de derechos y obligaciones de los ejidatarios y sus representantes, así en Yucatán en la mayoría de los 737 ejidos hay conflictos agrarios y traslapes territoriales, porque la llamada Certificación, según el RAN cerca del 90 % de estos, hay inconsistencias, esta es la causa que hoy el 60 % del territorio está en conflicto. Conclusión: No hubo voluntad ni capacidad, para llevar el procedimiento en forma legítima y se priorizaron los intereses económicos, las asambleas fraudulentas en las que Empresarios inmobiliarios, visitadores y comisariados ejidales se coludieron, para hacer transferencias de derechos ejidales a particulares en forma arbitraria e ilegítima a espaldas de la mayoría de ejidatrios. Hoy es la incertidumbre en materia de linderos legal o ilegalmente reconocidos y más exigencias de regularización a conveniencia de diferentes grupos.
GLA.- Rectifica que los cambios en el Art. 27 realizadas en las reformas de 1992, por lo que no tiene 36 años, significaron cambios para dar certeza a la propiedad y la inversión económica en el campo. El art. 75 de la nueva ley permite aportar tierras a las sociedades inmobiliarias, posibilita la asociación entre ejidatarios y empresarios. No hay necesidad ni tanto que reformar en el marco legal del actual artículo 27. A los ejidatarios que no quieran vender que se les respete sus derechos de posesión y/o propiedad correspondiente. Hay muchos vicios internos en los ejidos e intereses, y respecto a que la PA es cómplice de la crisis actual, en realidad, hay muchas limitaciones para influir en los intereses de los grupos ejidales que saben de su autonomía. Varios visitadores han sido amenazados, perseguidos y hasta golpeados en diferentes lugares por la agitación que sucede entre los diferentes grupos. Los comisariados ejidales no son ningunos angelitos.
SAT.- En efecto, no solo intereses de grupos internos soliviantan la situación en el campo, hay agrupaciones, de supuesta Sociedad Civil o llamadas Asociaciones Civiles, supuestos defensores de los derechos de los ejidatarios que intervienen, y complican los procesos de regularización, lo cuales son necesarios para el desarrollo. Puso como ejemplo la ciudad de Mérida, que gran parte de su crecimiento y desarrollo se debió a regularizaciones que promovió Alfonso Pereira del ejido de Chuburná. Puso como ejemplo la intervención de grupos civiles y del nuevo comisionado en la PA. Alfredo Ramirez en Chocholá en defensa de Claudia Cob, para que se le reconociera como Comisaria, así como otras acciones de autoridades que se involucran en los asuntos internos, que de esa manera acrecientan los conflictos.
SAT.- Coincide en la inmoralidad con que se legalizan algunos asuntos agrarios y expone que su trabajo es que los ejidatarios saquen el mejor provecho a sus tierras y puedan participar en los proyectos como el tren maya, al que ONGs de la sociedad civil fantasmas se oponen, y confunden a los campesinos.
GLA.- L PA. Sólo es orientadora. Les dice a los ejidatarios lo que pueden hace y lo que no, pero ellos hacen lo que quieren, no hay dirección social. Y como no se ponen de acuerdo en sus intereses, surgen los conflictos.
JSA. Sostiene que hay una dirección social, que se inició desde hace 36 años y reitera que la flexibilización en materia agraria se venía dando ya desde años 80s. Antes que Salinas y Cervera realizaron su reforma estructural en 1992 para poner el campo a tiempo del TLCAM, y que la tierra ejidal cambiara su carácter de propiedad inalienable, imprescriptible e inembargable, que no tenía tantos problemas. Pero con la reforma y la posibilidad de privatización, la ambición capitalista se volcó al campo transformándolo en un botín para los especuladores y traficantes. Una guerra entre empresarios de la construcción, de megaproyectos inmobiliarios e industriales, una forma de desarrollo, violento, injusto y depredador de la naturaleza. Y con sólo llenar las formalidades, inmoralmente, legalizan la trasferencia de derechos a ser ejidatarios propietarios. Así fue como sus despachos jurídicos, sus agentes, sus prestanombres y conflictos de intereses se trasladan al campo; y esta es la causa fundamental de lo que pasa. Respecto a la actuación de Alfredo Ramírez en la PA reciente, dice que de acuerdo al proyecto de la 4ª.T todas las operaciones, concesiones y transferencias que se hayan hecho dentro del marco de la ley, debe respetarlas, pero las que no, van para atrás. Por lo que es importante que se revisen todas asambleas y operaciones ejidales que se han hecho; y por la inmoralidad con que se legalizan las cosas, es importante una revisión de los expedientes. Saludó a Tu Espacio del Sureste, por este tipo de encuentros al que hay que darle seguimiento a nombre de la ley de transparencia y anticorrupción, y se acordó que el próximo jueves 12 continuar con la Mesa de discusiones con el mismo tema.