Por: Jesús Solís Alpuche
En efecto, actualmente envejecer abre perspectivas novedosas. Las personas adultas mayores somos sujetos de derechos que nos permiten ser socialmente activos, con garantías y responsabilidades respecto a nosotros mismos, nuestras familia y la sociedad, en el entorno mediato y con las futuras generaciones.
Las nuevas condiciones sociales, en amplios sectores nos dan esperanzas de una vida más prolongada. Pero económicamente, los jubilados y pensionados, del ISSTE, mayores de 75 años que adquirimos un seguro de vida institucional individual adicional empezamos a valer más muertos que vivos.
Esto no es un aforismo, y aunque en el siglo XXI, vivimos una globalización del envejecimiento porque existe en el mundo un aumento progresivo de la esperanza de vida, y una disminución de la mortalidad; el neoliberalismo económico de los últimos 35 años, determinó otro tipo de globalización en materia de leyes y derechos a favor de las empresas bursátiles y aseguradoras de vida, como la aseguradora Metlife y Arcos Dorados, la mayor franquicia de McDonald’s, que se alistaron en el Sistema Internacional de Cotizaciones de la Bolsa Mexicana de Valores de la mano de Deutsche Securities, con exuberantes ganancias a costillas de los mexicanos que pretendemos comprar una compensación por nuestra vida al morir.
Así el costo de esta protección adicional para la familia del asegurado, según el convenio firmado previa labor de consentimiento, dependerá de los años de vida del jubilado, y el descuento, a su pensión, se incrementará de acuerdo a su aniversario, cada cumpleaños.
Pero no crea Usted, que estos incrementos son de acuerdo con los aumentos anuales de las pensiones, ¡NO! Al llegar el asegurado a los 75 años los incrementos anuales en las primas del asegurado son despiadadas y voraces, respecto al monto de la pensión.
A los 76 años el asegurado tiene que pagar, por un seguro de vida de 22 meses, el 14.9 % de su pensión mensual. Al cumplir los 77 años le descontarán el 16.5 de su cheque mensual. A los 78 años el descuento será de 18.18 %. A los 79 años el 20.4 y al cumplir los 80 años el descuento para la aseguradora será del 22.7 %.
A partir de esta edad, los incrementos de los descuentos al cheque de la pensión por este concepto se hacer verdaderamente violentos, descarado despojo a la percepción del jubilado o pensionado. Y no me atrevo a publicarlos porque no vaya a ser causa de que personas, algunas, al enterarse prefieran dejar de vivir. Basta decir que el trabajador en retiro que pretenda llegar a los 90 años, llegará con el 10 % de su pensión, porque a la empresa aseguradora, le corresponderá el 90 % de su cheque por su Seguro de Vida.
Si en realidad con la 4ª.T aspiramos a un cambio verdadero, con justicia y dignidad, hay que atender y atacar este asunto, y no porque sea de afectación masiva dentro del pueblo mexicano, ya que es difícil llegar a los 90 años, sino porque la senescencia, merece respeto y este tipo de empresas leoninas, con la falsa expectativa del aseguramiento económico, manipula el ideal del convenio. En este cambio de régimen, ya no deben seguir ejerciendo con tanta impunidad el lucro en sus negocios. chantzacan@hotmail.com
