Por: Jesús Solís Alpuche
Esta semana que terminó nos reunimos en Dzilam Bravo, con varias docenas de pescadores que demandan permiso de captura de pesca de escama, de pulpo y pepino de mar y se quejan del sistema pesquero que prevalece en el puerto por el control de uno 900 permisos de captura de especies de escama, de pulpo y pepino de mar, en manos de una docena de los llamados “armadores”. Mientras más de 300 productores del mar, sólo de Dzilam, que carecen de del permiso, y aun llenando los requisitos de ley, son acusados de pescadores furtivos, por autoridades que han hecho de este difícil y peligroso trabajo en el mar, nido de corrupción.
Dentro del marco de promoción de la Unión Nacional de Productores de Alimentos, que aspira a ser estelar en la 4ª.Transformación del país, un proyecto que promovemos en el Barzón Nacional y otras organizaciones de productores agropecuarios, que incluye la producción pesquera, con miras a alcanzar una soberanía y autosuficiencia alimentaria que a solicitud de la Cooperativa “Mar y Tierra Brava de Dzilam” y otras agrupaciones locales que buscan la regularización en el trabajo pesquero, nos reunimos con varias docenas de pescadores del puerto con el resulto siguiente.
Denuncia de irregularidades en la administración de 900 permisos, que, en su mayoría, controlan, capitalistas que no son pescadores, lo mismo que la depredación de las especies marinas y la comercialización del producto en el mercado nacional, cuyo acceso es exclusivo de los permisionarios. Temporadas que estos mismo “empresarios” de la producción pesquera atraen cientos de pescadores de otros puertos, incluso de otros Estados, con tal de extraer el producto cayendo en terrenos de la depredación. Pesca a base de arpón, un sistema que también está pronunciando exterminio de las especies más valiosas, del territorio marítimo que el puerto de Dzilam Bravo considera su patrimonio.
En comunicación telefónica con el recién nombrado Delegado de Pesca Lic. Oscar Brito Zapata, dijo que en efecto en varios puertos de Estado hay anomalías que ya están catalogadas administrativamente. En su opinión hay pescadores irregulares, que aún con equipo y apegados a los programas de veda, experiencia y cuidado en el trabajo pesquero, trabajan en forma irregular, porque no tienen permiso, pero hay otros denominados como furtivos, que ni tienen permiso, ni se apegan a los programas de vedas, por lo que hay serios problemas heredados del sistema.
Dijo que es muy importante la regularización de los permisos de todos los pescadores que cubran los requerimientos de ley, pero esta gestión se realiza en el puerto de Mazatlan, Sinaloa. No obstante, El titular de la Comisión Nacional de Acuacultura y Pesca (Conapesca), Raúl Elenes Angulo, en su primera visita a Yucatán y acompañado del Delegado de los Programas de Desarrollo en el estado Joaquín Díaz Mena, señaló que existe la posibilidad de abrir una ventanilla exclusivamente para que los pescadores puedan tramitar sus permisos sin la necesidad de viajar hasta Mazatlán, aunado, a que se combatirá la corrupción que se da en la pesca.
Basados en la palabra del presidente López Obrador, de que ahora en México, por el bien de todos, están primero los pobres, sin exponer las causas por lo que más de 900 permisos de captura pesquera, se encuentra en manos de una docena de “empresarios” plantearon la necesidad de recuperarlos. Frente a la discusión de que si los permisos como derechos eran susceptibles de ser vendidos, o trasferido a manos de particulares, Juventino Sánchez expuso que de ninguna manera, pueden ser vendidos o transferidos legalmente, puesto que estrictamente personales, a nombre del pescador y la matrícua pesquera que se le acredita. Por lo tanto, quienes acumulaban permisos de diferentes manera y causas distintas deberían regresar a sus dueños.
Manuel López Fernández, opinó que había que consultar las leyes, porque los armadores no son tontos, y consideraba difícil que reintegraran los permisos a sus legítimos dueños, si voluntariamente se los habían vendido, o les debían dinero. Pero hay que lucharlo, dijo
Para concluir, después de un interesante debate, en que se acordó la unidad de todos los pescadores, en defensa de sus derechos, plantearon una revisión al Padrón de los permisos otorgados, y acumulados en manos de empresarios, para que en su caso, sean reintegrados a sus propietarios originales, así como la atención a más de 300 pescadores solicitantes de parte de las autoridades.
Haciendo algunas consideraciones al respecto, es importante que todos los productores del mar se unifiquen en la defensa de sus intereses como productores. El reto para el sector pesquero, es su conciencia organizativa. Sin permisos oficiales, ningún pescador puede acceder a los apoyos para mejorar su infraestructura productiva, además que siempre correrá el riesgo de que se le confunda cono furtivo.
El proyecto de la 4ª.T aún no se vislumbra en Yucatán. Aparentemente el proyecto de Regeneración política adolece del espíritu, solidario y de participación, que López Obrador recalca todos los días en sus entrevistas mañaneras. Los intereses monopólicos que históricamente han manejado al sector pesquero en el país, en nuestra península ha sido más depredador con el mar y salvaje con los productores, que no tienen ninguna garantía laboral ni social y en cambio tienen que arriesgar la vida todos los días en el mar sin seguros de vida y en ocasiones por irresponsabilidad sin salvavidas ni los implementos que marca las reglas de sobrevivencia en el mar.
No es posible que nuestra suficiencia alimentaria siga dependiendo de las importaciones de granos y otros alimentos cuando tenemos tanto territorio y litorales, Tampoco es justo que como me dijo una ama de casa en ese puerto. “Hubiera querido invitarles a comer pescado, pero no hay, no podemos pescar, pues no contamos con permiso, aunque tenemos lancha y cordeles. chantzacan@hotmail.com
